Pollo a la Pizza: Una Receta Que Sorprenderá a Todos

Introducción a la Receta Pollo a la Pizza

El Pollo a la Pizza es una deliciosa combinación de sabores italianos y el inconfundible gusto del pollo asado. Esta receta ha ganado popularidad por su sencillez y porque es perfecta tanto para una comida familiar como para una cena especial. Si eres amante de la pizza y también disfrutas de un buen plato de pollo, esta receta es la opción perfecta para ti.

Con el Pollo a la Pizza, se logra capturar los elementos esenciales de una pizza clásica —la salsa de tomate, el queso y los ingredientes típicos como el jamón y las aceitunas— pero con la jugosidad y la textura del pollo. Este platillo es ideal para aquellos que buscan una versión baja en carbohidratos de su pizza favorita o simplemente quieren probar una variante original y sabrosa.

Lo mejor de esta receta es su versatilidad. Puedes adaptar los ingredientes a tu gusto, haciendo que cada vez que prepares Pollo a la Pizza sea una experiencia diferente. A continuación, te mostramos cómo preparar esta increíble receta paso a paso.

 

Ingredientes de Pollo a la Pizza

La magia del Pollo a la Pizza radica en la combinación de ingredientes frescos y sabrosos. Asegúrate de contar con todo lo necesario antes de comenzar:

  • 4 pechugas de pollo (puedes usar muslos si prefieres una carne más jugosa)
  • 200 gramos de salsa de tomate (puedes usar tu salsa favorita o hacerla casera)
  • 200 gramos de queso mozzarella rallado
  • 50 gramos de jamón cocido en rodajas finas
  • Aceitunas negras al gusto (opcional, pero muy recomendadas)
  • 1 pimiento rojo cortado en tiras
  • Orégano seco al gusto
  • Sal y pimienta al gusto
  • Aceite de oliva para dorar el pollo.

Modo de Preparación de Pollo a la Pizza

El Pollo a la Pizza es muy fácil de preparar. Sigue estos pasos para lograr un plato delicioso:

  1. Precalentar el horno a 180°C. Esto asegurará que el pollo se cocine uniformemente y se derrita el queso en la parte final del proceso.
  2. Preparar el pollo: Salpimienta las pechugas de pollo por ambos lados. Luego, en una sartén con un poco de aceite de oliva, dóralas a fuego medio-alto hasta que estén bien selladas por fuera, pero aún crudas en el centro. Esto toma unos 4-5 minutos por lado. Retíralas del fuego y colócalas en una bandeja para horno.
  3. Agregar la salsa: Cubre cada pechuga con una generosa cantidad de salsa de tomate. Asegúrate de que toda la superficie esté bien cubierta para obtener ese sabor de pizza tan característico.
  4. Añadir los ingredientes: Coloca una capa de jamón cocido sobre la salsa de tomate y distribuye las tiras de pimiento rojo sobre el jamón. Añade aceitunas si lo prefieres.
  5. Espolvorear el queso: Cubre todo con el queso mozzarella rallado. No escatimes, ya que el queso es clave para darle al pollo ese toque cremoso y gratinado.
  6. Hornear: Lleva el pollo al horno durante unos 15-20 minutos, o hasta que las pechugas estén completamente cocidas y el queso esté dorado y burbujeante.
  7. Terminar con orégano: Una vez fuera del horno, espolvorea orégano seco sobre cada pechuga para darle ese aroma y sabor típico de una pizza.